Los Programas o Campañas Permanentes, comprenden la labor delineada para la vigencia del plan es decir, que tienen un desarrollo estable y por lo tanto se conocen los recursos que serán necesarios para sus realizaciones, pudiéndoselos coordinar adecuadamente y controlar su gestión con regularidad. En esta categoría se puede mencionar como ejemplos: La campaña anual de publicidad institucional, los contactos con los diversos sectores de Públicos de influencia para la entidad las comunicaciones públicas incluyendo las publicaciones estables; la acción Institucional en general; etc.
Los Programas o Campañas Transferenciales, son aquellos que por sus resultados u oportunidad, pueden pasar de una a otra las categorías . Por ejemplo, un Programa o Campaña Transitoria que por la repercusión favorable, se extiende su realización con posibilidades de darle carácter Permanente (Y en ello influyen los recursos con los que se cuentan y la positiva inserción como tal en el plan ). De la misma manera puede ocurrir que un Programa o Campaña Permanente, de acuerdo con los resultados obtenidos y las evaluaciones realizadas, sea conveniente, antes de desactivarla, transferirla a la categoría Transitoria, asignándole nuevos plazos y metas.
En la práctica, una actividad que fue diseñada para neutralizar un determinado problema o para corregir un aspecto negativo frente a los públicos para lo cual se planificó un Programa o Campaña Transitoria (por ejemplo con una duración de tres meses), los buenos resultados obtenidos aconsejan extender la acción durante un lapso mayor (tentativamente a seis meses) y así se siguen registrando condiciones positivas, el carácter Transferencial asignado en la segunda etapa, puede convertirse en Permanente, si las posibilidades operativas lo permiten
El Planeamiento, estructura su acción sobre la base de un conocimiento cabal de la situaci6n y las perspectivas posibles y probables e inicia el procedimiento de frente a un futuro que puede ser previsto pero al que solo puede auscultar por medio del pronóstico; vale decir, "la gestión de determinar ordenadamente una serie de efectos que se formalizan hacia el futuro, en busca de resultados con relación a una finalidad, que puede ser social, económica, políticas o consecuentemente cultural
El Plan nunca debe exceder la medida de las posibilidades reales de la organización, ni desentonar con las finalidades de la misma y mucho menos, con las variables del propio contexto al que esta dirigido. Para ello, en la prognosis previa, se trazan las llamadas hipótesis de conflicto, que representan obstáculos que en razón de las tendencias, pueden producirse en el proceso del plan, las cuales son advertidas con diversos grados de aproximación a los cursos establecidos, permitiendo adoptar los recaudos necesarios para sortear dichas situaciones posibles, disminuyendo así los riesgos y las consecuencias.
Es posible que la acción más comprometida en todo el proceso del planeamiento, sea la de determinar el grado de certeza o las probabilidades que ofrece cada variable. Esta incertidumbre existe debido a que en los planes (y los Programas o Campañas Constitutivas) se formulan en un tiempo presente conocido sobre bases de expectación, hacia el tiempo futuro desconocido al que solo se puede llegar con pronósticos. Esto es propio de cualquier método de planeamiento y en todos los cases, deben atenderse diversos factores concurrentes tales como las Políticas de la Organización, el Uso Alternativo de Recursos, la situación Económico-Financiera, las Modalidades de la Dirección y su Flexibilidad frente al desarrollo de Plan Sectorial con relación al Plan General de la misma Organización, el Grado de Interdependencia que ofrece el Plan, las Expectativas Internas y Externas y las Consecuencias del Riesgo.
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